7.08.2010

Fuimos hechos para pensar y soñar en cosas que no existen. El que descubrió el fuego, el que inventó la rueda y el que forjó la primera espada de metal fueron catalogados como simples primates afortunados y pasaron al recuerdo sin pena ni gloria. El que vio un líder predicando y se le ocurrió que podría existir dios, ese sí que se topó con un golpe de suerte.

No hay comentarios.: